Es de público conocimiento los hechos acaecidos el pasado martes 24 de Marzo, donde el copiloto de la empresa Germanwings estrelló el avión que tripulaba en los Alpes Franceses dejando 149 víctimas.

Se llamaba Andrea Lubitz, tenía 27 años y había estado bajo tratamiento psiquiátrico durante un largo periodo de tiempo con evidentes tendencias suicidas antes de obtener su licencia.

Este hecho nos hizo reflexionar sobre un tema que es poco tratado en la actualidad: cómo es el seguimiento que se les da a las cuestiones emocionales dentro de las empresas y cuáles son los impactos.

Las experiencias son fuentes de emociones, y ellas son el motor en la toma de decisiones y un aspecto fundamental en el desempeño del personal. Las emociones crean realidad y se ha descubierto que son las principales guías de la actividad humana. 

Si traspolamos dichas consideraciones a la vida organizacional podemos recalcar la importancia que tiene la gestión y seguimientos de las emociones en el crecimiento profesional y personal de nuestros empleados.

De más está decir que se torna vital el tema tratado en empresas cuyos empleados tienen en sus manos la vida de otras personas, como organizaciones de transportes, de salud, de seguridad, etc.

En general, la mayoría de las empresas, llevan a cabo una serie de pruebas psicológicas al comienzo de la relación laboral, para ver si la persona es o no apta para el puesto a cubrir. Pero luego de la contratación, ¿le damos seguimiento a sus cuestiones emocionales? ¿Sabemos cómo es la vida de nuestros empleados hoy y en el pasado? ¿Cómo afecta ello a su rendimiento? ¿Tratamos a nuestro personal como empleados o como personas?

La respuesta a muchos de estos interrogantes pueden descubrirse con reuniones individuales, evaluaciones psicológicas anuales, o hasta la simple observación puede dar cuenta si existen o no emociones positivas o negativas.

Es tarea del departamento de RR.HH . darle seguimiento a estos temas pero observar cambios en la personalidad, es responsabilidad de toda la organización.

Saber ello nos permite encontrar diversos cursos de acción que mejoren la vida laboral y personal, favoreciendo así la generación de un ámbito laboral proactivo, que  evite de esta manera situaciones como la de Germanwings, malos tratos, desempeños deficientes, desmotivación, faltas y demás.